Mira bien el sendero por dónde caminas, Dios ha dejado señales que debes seguir para llegar a la meta. Acércate a EL para que logres entender sus señales.
La espera mirando a Dios trae esperanza, la espera mirando el problema o la circunstancia trae desaliento. Sea cual sea la situación que estas pasando, no dejes de poner tu mirada en el Señor.