Algo constante que Dios esta haciendo en nuestras vidas es llamarnos a oportunidad de crecer en la relación con ÉL. Pero también nos llama a la edificación de unos con otros, buscando el crecimiento del otro y no del uno propio.
La espera mirando a Dios trae esperanza, la espera mirando el problema o la circunstancia trae desaliento. Sea cual sea la situación que estas pasando, no dejes de poner tu mirada en el Señor.